EL PARQUE JOSÉ FÉLIX VILLARINO
Localización
La Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario está ubicada en la localidad de Zavalla, departamento Rosario, Provincia de Santa Fe, a los 33º01′ de latitud Sur y 60º53′ de longitud Oeste. Ocupa un predio de 507,35 ha, de las cuales 100 ha, de forma cuadrangular, están ocupadas por el parque J.F. Villarino, que alberga sus principales instalaciones edilicias y una escuela primaria.
Reseña histórica
El predio de la Facultad es un legado de la familia Villarino al Poder Ejecutivo Nacional, por el cual donan la propiedad Granja “La Estrella” de aproximadamente 500 ha. En este legado, se especificaba que en 100 ha de este campo, se fundara un Colegio Nacional con internado para educación agrícola y se destinara parte de la superficie a la creación de un parque que llevaría el nombre “José Félix Villarino”, en memoria del padre del legatario. Entre 1937 y 1940 se elaboró el proyecto del parque y escuela, mencionándose como su creador, fundador y autor al Dr. Carlos David Storni (1884-1977), mientras se desempeñaba como Director General de Agricultura y Defensa Agrícola de la Nación. Las obras comenzaron en 1940 sin fecha cierta de terminación.
En la memoria del año 1945 se indica que había un vivero de aproximadamente 6 ha, donde se producían plantas leñosas, parte de la producción se enajenaba y el resto se incorporaba a las arboledas. También se menciona en dicha memoria que se cosechaban semillas forestales. En el año 1946, por resolución ministerial, se crea una escuela de jardinería en el predio.
Posteriormente, el Ministerio de Agricultura cede el uso del Parque Villarino y el campo anexo al Ministerio de Educación quien a su vez los cede a la Universidad Nacional de Rosario que recibe “para uso y goce” el predio con sus instalaciones.
La universidad destina el predio al Campo Experimental de la Facultad de Ciencias Agrarias y establece que en el mismo se construya el edificio de la Facultad y sus instalaciones complementarias. Siguiendo las instrucciones del legado, la UNR localiza en un extremo cercano al pueblo una escuela primaria a la que asisten los niños del pueblo de Zavalla y alrededores.
La Facultad de Ciencias Agrarias inicia sus actividades el 3 de abril 1967 en la ciudad de Rosario, dependiendo de la Universidad Nacional del Litoral hasta 1968, cuando se crea la Universidad Nacional de Rosario y se traslada definitivamente al Campo Experimental de Zavalla en abril de 1994.
Diseño
El diseño original del parque es simple y simétrico, teniendo como eje un bulevar central que conecta la entrada principal con el edificio de la facultad. Los árboles se encuentran flanqueando los caminos en una o varias hileras y en pequeños grupos en los espacios abiertos. En su mayoría exóticos, estos árboles armonizan sus diferentes alturas, formas y tamaños de copas, con follajes caducos y perennes, variando su aspecto a lo largo de las estaciones del año. Este diseño ha sido mayormente modificado por la apertura de nuevos caminos y el cierre de otros, a medida que se fueron ampliando las construcciones.
Vegetación
Las arboledas originales están conformadas por 160 especies, pertenecientes a 47 familias botánicas. En los sectores abiertos se encuentran céspedes espontáneos que presentan un 83% de especies nativas, muchas de ellas integrantes del pastizal pampeano original de la zona. Estos céspedes se mantienen con cortes frecuentes.
En los sectores sin mantenimiento del césped, tiene lugar un proceso de invasión de especies leñosas que forman núcleos boscosos caracterizados por la dominancia de distintas especies: Acer negundo, Ligustrum lucidum, Bauhinia forficata, Ulmus americana,Tecoma stans, Broussonetia papyrifera, Fraxinus pennsylvanica, Juglans nigra y otras. Las dos primeras suelen formar núcleos boscosos casi puros.
En todo el parque es posible encontrar también especies de vegetales inferiores tales como musgos, hongos y helechos. A pesar de los cortes de césped necesarios para su mantenimiento y ocasionales pastoreos de vacunos y ovinos; prácticamente el suelo no ha sufrido disturbios, a diferencia de los campos circundantes que se encuentran bajo agricultura permanente.
Fauna
Las aves constituyen la fracción más visible de la fauna del parque. Se han identificado más de 60 especies pertenecientes a 29 familias y 12 órdenes respectivamente, de las cuáles cerca del 60% anidan en el área y sus zonas circundantes donde logran los recursos para satisfacer sus necesidades de alimentación, refugio y reproducción. Destacan por su papel preponderante en las cadenas tróficas; varias especies de rapaces diurnas y nocturnas (lechuzas, gavilanes, chimangos, caranchos, halcones y otras), por el control que ejercen sobre las poblaciones de roedores y la eliminación de los animales muertos. Aves migratorias que nidifican en el hemisferio norte y en otras regiones del país, utilizan el sitio para pasar una parte del año, tales como la tijereta y el churrinche (paseriformes). Entre los cucúlidos destacan por su abundancia la pirincha, y entre los psitácidos, la cotorra verde. Existen también varias especies de carpinteros (piciformes) y de furnáridos (el hornero, nuestra ave nacional). Están bien representados los ictéridos (tordos), mímidos (calandria) y túrdidos (zorzales). En el año 2015 se inició un nuevo relevamiento de la avifauna, con miras a la actualización de la lista de las “Aves del Parque Villarino y zonas adyacentes”; ya que la primera lista abarca el período 1998-2004. De este modo se pretende registrar la aparición de nuevas especies, la desaparición de otras y eventualmente explicar la razón de estos cambios.
En relación a las demás clases de vertebrados; entre los mamíferos destacan los órdenes quirópteros (murciélagos), marsupiales (zarigüeya), edentados (mulita) y roedores con varios representantes. En época de lluvias se registra la presencia de sapos, ranas y escuerzos (anfibios). En la clase de los reptiles se pueden observar varias especies de lagartijas, el lagarto overo y varios géneros de culebras, con otros tantos representantes.
Se estima en varios miles el número de invertebrados (Insectos, arácnidos y otros), los cuáles resultan imprescindibles para el mantenimiento de procesos ecológicos tales como la descomposición de la materia orgánica, el reciclado de los nutrientes y la polinización de las plantas.
El valor del parque
El parque Villarino por su biodiversidad, por los procesos de invasión y dinámica de comunidades que se dan en él, por ser refugio de especies nativas, por ser lugar de propagación de adventicias, por su valor educativo y estético, y por otros aspectos ya señalados, es un espacio verde único en una amplia región agropecuaria. Sus distintas fisonomías brindan variedad de hábitats que estarían actuando como refugios para un gran número de especies vegetales nativas que se encuentran en riesgo de extinción, algunas ya prácticamente desaparecidas en la región, como consecuencia del proceso de agriculturización, que comenzó hace aproximadamente cien años y que se profundizó en los últimos treinta con el monocultivo de soja. Alberga además un importante número de especies de vertebrados, como así también multitud de invertebrados.
Por los motivos expuestos el parque fue declarado Área Protegida del Paisaje Cultural de Administración de la UNR, por Res. CD N° 459/11 y Res. CS N° 890/12. Esta es una categoría definida por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) referida a áreas cuyas características son el resultado de la interacción entre el hombre y la naturaleza. Se refiere a aquéllas generadas por el hombre a través de actividades productivas, o que por su valor histórico, asociado a rasgos naturales de importancia (flora y fauna) y aspectos paisajísticos, se reservan con propósitos culturales, científicos, educativos y turísticos; con la prohibición de toda acción que produzca el deterioro o destrucción de estos valores. Dadas las características del área, las actividades deberían estar dirigidas a mantener la calidad del paisaje, mediante planes de ordenamiento adecuados. En el año 2015 se concretó la inscripción del parque en la Agenda Internacional para la Conservación en Jardines Botánicos (BGCI), correspondiéndole el n° 48 dentro del país y el n° 5142 en el orden internacional. Además, el 8 de junio de 2016 fue nombrado Sitio Importante para la Conservación de los Murciélagos (SICOM) por la Red Latinoamericana y del Caribe para la Conservación de los Murciélagos. Habiendo sido registrado con el código: S-AR-005
El parque es para todos y todos debemos cuidarlo.
Cabe mencionar que el parque cuenta con una Comisión Asesora sobre temas vinculados al mismo.
Dirección de contacto: comisionparque-agr@unr.edu.ar